Realidad

Después de tanto caos, aún la tormenta no ha llegado a su climax, sigo en el ojo del huracán donde la lluvia me moja los pies y el viento me alborota el cabello pero el sol sigue brillando sobre mi cabeza. ¿Cuándo entenderé que todo es pasajero? Debo prepararme. Todo pasa, todo cambia.

No hace ni un mes de tu partida y ya te siento tan lejos......

Reconozco que corrí en dirección contraria, mirando hacia atrás pero mi dirección ya no era la tuya. A veces regreso pero solo doy unos pasos, luego reconsidero y me amo, vuelvo a alejarme. No quiero sufrir, de nuevo.

No quiero ser egoísta. Regreso s ti. La realidad me golpea, y me alejo.

Si algún día lees esto, dime. Verás como regreso, tan cerca como nunca estuve.

Si jamás lo lees, sé que al menos sentirás un calor anormal cuando yo lo haga, será ese amor encapsulado cuya fecha de vencimiento venció hace mucho. Perdura, y perdurará.

¿Es real? ¿Fue real? ¿Volverá a serlo? Que mierda.

Aún me pregunto si debería estar escribiendo sobre ti, aún cuando esto podría aplicarse a muchas cosas, a muchas situaciones y a muchas personas sigues siendo tú quien me revoluciona hasta la respiración. ¿Es real o yo lo percibo así?

Ya no sé que es real y que imagino. No se supone que suponga tanto, que redundante... O más bien rebundante. Mi vida siguió y al parecer la tuya también, sin embargo me siento estancado, debo decirlo. ¿Es coherente? Definitivamente no, dejó de serlo unas líneas arriba. De todos modos, esto nuestro jamás fue coherente así que cualquier cosa relacionado tampoco debería serlo. En fin, seguiré en el ojo del huracán, danzando conforme el viento mueva las nubes tormentosas, procurando estar siembre ubicado bajo aquel amarillo aceituna que me eriza la piel y me mantiene cálido en este mundo glacialista.